Freddie Mercury y la casa del adiós

diciembre 10, 2018

No hay dudas que la exitosa biopic Bohemian Rhapsody sobre Freddie Mercury y la historia con su banda Queen, ha hecho resurgir el interés por éste, uno de los grupos de Rock más originales y vendedores de todos los tiempos.

La capital británica es el lugar donde Queen se formó y nuestro libro LONDRES: LA GUÍA DEFINITIVA PARA CONOCER LOS LUGARES HISTÓRICOS DEL ROCK incluye varios lugares hechos famosos por la banda o por sus miembros.

Freddie destaca desde ya, siendo un mito que se fue joven: una personalidad exótica y avasallante y un cantante y showman de no creer. Acá les brindamos un extracto de nuestro libro, referente al lugar donde Mercury vivió, y murió.

Vida y muerte de Freddie Mercury
Dirección: 1 Logan Place –Estación: Earls Court Línea: Circle / District / Piccadilly
La actividad turística londinense como fan de Queen puede ser muy intensa si se desea seguir a fondo los pasos de la increíble banda comandada por quien, posiblemente, fuera el mayor frontman del Rock inglés: Freddie Mercury.
Seguramente la meca sea el número 1 de Logan Place, la casa donde vivió sus últimos años Freddie, hasta su desaparición física.
La estación de metro Earls Court tiene dos salidas principales: una hacia Warwick Road, la otra por Earls Court Road. Por ésta se accede algo más rápido a Logan Place. Se sale entonces, por Earls Court Road hasta llegar a W Cromwell Road, que la atraviesa (Nota: muy cerca de allí, en el 153 Cromwell Road, vivió Alfred Hitchcock). Cruzando ésta y caminando aproximadamente 50 metros más, aparece a la izquierda, Logan Place, que es una estrecha arteria donde se encuentra la casa que buscamos.

La calle es una especie de pasaje bastante largo, de más o menos 150 metros de extensión, entre casas con árboles frondosos y mucho silencio. Y al fondo, a la izquierda, la mansión Mercury.
Un alto muro rodea la vivienda, aunque se puede apreciar sin problemas su parte superior. Es fácilmente distinguible por su puerta con la leyenda “Garden Lodge” permanentemente llena de graffittis y mensajes de amor hacia el gran cantante detrás de placas de plástico trasparente.
Allí, el 24 de noviembre de 1991, apenas un par de días después de informar al mundo que estaba enfermo de SIDA, Freddie Mercury murió. Y en el 1 de Logan Place, quedó flotando el último suspiro de El Cantante de la Reina. Solo tenía 45 años